#8 Preguntas: Mitos y verdades sobre la exposición al sol

El fotoenvejecimiento y el cáncer de piel por acción de los rayos solares ha crecido en los últimos años. ¿Es que el sol está más “malo” como algunos piensan? ¿Es revertible el daño?

En #8Preguntas, Patricio Muñoz, Jefe de Producto de Bagó, responde las principales dudas sobre los cuidados que debemos tener especialmente en el verano.

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Pregunta 1. ¿Cuáles son los principales riesgos de la exposición al sol, en el corto plazo y en el largo plazo?

A corto plazo el principal riesgo para la piel luego de la exposición solar es la quemadura solar que puede ser de diverso grado.Incluso puede llegar a la insolación con compromiso de estado general por deshidratación.

A largo plazo, es el fotoenvejecimiento, es decir el envejecimiento de la piel en forma prematura e independiente de la edad biológica de la persona.

Esto se evidencia en la aparición de arrugas y manchas café llamadas lentigos solares. Lo más grave es la aparición de cáncer de piel. 


Pregunta 2. De acuerdo a cifras oficiales del ministerio de Salud, en 2022 hubo 530 muertes por cáncer de piel, lo que implica un alza de 40% en 20 años. A su juicio, ¿a qué se debe esta alza tan violenta?

El cáncer de piel ha aumentado en todo el mundo y también en Chile y esto se debe al cambio de hábitos de las personas, la moda del bronceado y la exposición no protegida.

El sol no “está más malo que antes”. El índice de Radiación UV medido por la Dirección Metereológica de Chile no ha variado en verano en los últimos 30 años y la capa de ozono se ha recuperado desde 2015 en el hemisferio sur.

Lo cierto es que las personas se exponen más al sol.Y a eso se suma un aumento en las consultas dermatológicos y por ende una mayor detección.


Pregunta 3. ¿Cuál es la diferencia entre rayos UVA y UVB y cómo impacta en nuestro organismo, ya sea en la piel o el pelo?

La radiación Ultravioleta forma parte de las radiaciones electromagnéticas emitidas por el Sol que llegan a la tierra y constituyen sólo el 5% de ellas.

La radiación ultravioleta B (o UVB) es la que tiene mayor energía y es responsable en mayor medida de la quemadura solar y del daño en el ADN de las células. Induce la producción de dímeros de timina citocina en el ADN y si la piel no es capaz de repararlo, deriva en cáncer de piel.  La UVA tiene menor energía, pero penetra más profundamente en la piel, induce un daño de tipo oxidativo en las membranas celulares y en las fibras de sostén de la piel.

La UVA es la mayor responsable del fotoenvejecimiento y contribuye a la aparición del cáncer de piel por su efecto oxidativo en el ADN de las células.


Pregunta 4. Existen diferencias entre los productos para proteger la piel. ¿Qué tipos de productos existen y cuáles son sus características?

Lo que hay que tener claro es que la mejor protección solar la brinda la ropa.

Los protectores solares deben proteger contra la radiación ultravioleta de tipo A y B, deben tener una onda crítica de 370mn lo que quiere decir que ese es el rango en que el 90% de la radiación UV es absorbida. Son mejores los protectores solares que contienen antioxidantes, ya que les permite proteger contra el daño que produce la radiación infrarroja que es la que llega en mayor proporción a la superficie de la tierra (55%).

Los que tienen color, además nos protegen de la luz visible. Estas longitudes de onda en conjunto con la radiación UV favorecen el fotoenvejecimiento y en menor grado el cáncer de piel.

Heliocare 360° es un fotoprotector que cubre las radiación UVB – UVA – IR – Visible, además de tener acción antioxidante y reparador de daño celular. (Más información aquí.)


Pregunta 5. En los envases de productos aparece la sigla FPS junto a números 15, 30, 60, por ejemplo. ¿Qué significa? ¿Es que uno proteja menos que el otro? ¿O tiene que ver con el tiempo de permanencia en la piel?

FPS se refiere al porcentaje de protección que brinda un determinado producto, aplicado en la cantidad adecuada, contra la radiación UVB.

Es así como un producto que sea FPS 15 impide el paso del 93.3% de la UVB un FPS 30 un 96.7% y uno que sea FPS 50 de un 98.3%.

Todos permiten que un porcentaje de la radiación alcance la piel y todos al hacerlo se agotan, por lo que a las 2 o 3 horas, dependiendo del grado de actividad de la persona, su sudoración o si se moja, se deben reaplicar.

El grado de protección contra la UVA debe estar también rotulado.


Pregunta 6. ¿Qué cantidad de protector solar debo aplicar y con qué frecuencia de manera preventiva?

Para que un protector solar sea efectivo y proteja lo que dice su FPS, debe aplicarse 2mg/cm² de piel.

Eso equivale a 9 cucharaditas de té para todo el cuerpo:

1 para cara, orejas, cabeza y cuello

2 para el tronco

1 para cada brazo y 2 para cada pierna.

Se debe reaplicar cada 3 horas si está en reposo y en actividad física cada 2 horas y cada vez que se moja.


Pregunta 7. ¿Qué tipos de productos se recomienda aplicar en piel y pelo post exposición al sol para evitar el fotoenvejecimiento?

No hay productos que se puedan aplicar para revertir el fotoenvejecimiento.

Algunos productos que contienen fotoliasas podrían ayudar en algún grado a reparar el daño en el ADN de las células.


Pregunta 8. ¿Esta protección es igual por edad? ¿Qué se recomienda para niños, adultos y adultos mayores?

En los niños no se debe aplicar nada antes de los 6 meses y no debieran ser expuestos al sol por el peligro de deshidratación producto de la pérdida de agua por el calor.

Desde los 6 meses se prefieren los productos que sean rotulados para niños. Estos contienen preferentemente fotoprotectores de tipo inorgánico o físico cuyo efecto es reflejar o difractar la radiación para evitar que penetre en la piel. En los adultos muy mayores también se prefiere este tipo de productos.

En los adultos los protectores solares deben contener un porcentaje de filtros inorgánicos o físicos y filtros orgánicos o químicos que absorben la energía de la radiación. Deben idealmente contener antioxidantes.

La forma galénica no importa, importa usarlo y en forma adecuada.  Con respecto al FPS se recomienda que sea 30 o superior y, en caso de antecedente de cáncer de piel, 50+.